El Campeonato del Mundo de Rallycross 2016 busca campeón y si ayer hablábamos del candidato que más difícil lo tiene, hoy toca el cuarto clasificado: Andreas Bakkerud. Este noruego ha demostrado ser un gran artista cuando coge el volante de su Ford Focus RS RX ya que pocos como él saben poner el coche de lado o coger por completo un piano para apurar la curva. Su conducción es equilibrada, aunque tiende algo más a ir de lado que el resto algo que el chasis de su vehículo soporta a la perfección.
Prueba tras prueba ha demostrado ser un campeón. No le hace falta ganar el título para que sepamos eso. Pero no por ello deja de quererlo este piloto que el lunes de 10 octubre de 2016 cumplirá 25 años tan solo. Esta temporada está siendo, hasta el momento, la mejor para el noruego en los tres años que lleva conduciendo Supercoches. Fue 5º el primero año, 4º el segundo y nada hace pensar que empeore esa marca tras ganar ya dos pruebas, la de Hell (Noruega) y Höljes (Suecia) y subirse al podio en otras dos ocasiones (Trois Rivières y Lohéac). Además tiene otros dos cuartos puestos en su palmarés de esta temporada.
Con dos pruebas por disputarse el piloto número 13 suma 192 puntos. Es 4º clasificado y por delante tiene a Petter Solberg (3º/194), Johan Kristoffersson (2º/201) y Mattias Ekström (1º/228). Esto le coloca por tanto a 36 puntos del líder, dejándole un margen bastante escaso de error. Mejor dicho, nulo. Andreas Bakkerud tiene que remontar una cantidad bastante alta. Al menos 18 puntos por prueba siempre y cuando el líder se quede sin puntuar en ambas pruebas, algo prácticamente imposible.
El repetir 'la prueba perfecta' (es decir, sumar los 30 puntos en juego ganando fase clasificatoria, semifinal y final) como ya hizo en su país natal tanto en Estering como en Rosario allanaría seriamente el camino. Ese pleno, algo complicado pero ya ha logrado y casi repetido (en Höljes hizo 29 puntos) sería clave para sus aspiraciones. Esto es algo muy difícil de lograr y esta temporada solo lo han hecho él y Mattias Ekström en una ocasión. Dicho piloto anularía las opciones de Bakkerud si alcanza la suma de 25 puntos entre las dos pruebas restantes, a partir de esa cantidad el noruego tiene el campeonato matemáticamente imposible, siendo este por supuesto el primer requisito para ser campeón.
Y es que todo esto, son matemáticas. Las opciones reales son mínimas. Mattias Ekström debería tener dos fines de semana malos y esto se antoja imposible. El Audi S1 no ha bajado de los 15 puntos en ninguna prueba de este año, siguiendo esa línea, haría 30, descartando así de una tacada a Sébastien Loeb (con mucho menos margen) y Andreas Bakkerud. El propio piloto de Hoonigan Racing Division sabe lo difícil que lo tiene. Necesita 36 puntos y que sume como tope 24 el líder. Pero este no es su único rival en esta agónica pelea por ser el mejor.
Cara a cara
Petter Solberg tiene dos puntos más que él, distancia más que salvable. Pero por delante de este está Johan Kristoffersson. Cazar al segundo clasificado es, en teoría, sencillo ya que la distancia es de nueve puntos. Recuperable en dos pruebas, de lejos. Pero hay que hacerlo y evitar también que este piloto del equipo Volkswagen RX Sweden sume a su casillero más que el noruego. El cara a cara entre ellos es favorable al sueco por 7-3 pero la distancia es pequeña debido a que los triunfos de Bakkerud han supuesto una brecha mayor y que los del número 3 de la parrilla en tres ocasiones han sido de un solo punto a su favor.
Con su compatriota, Petter Solberg, el cara a cara se determina con cinco victorias del vigente campeón del mundo, cuatro de Andreas Bakkerud y un empate. Con el líder todo es incluso más parejo: cinco victorias para cada uno. Esto muestra la igualdad de pilotos a pesar de la diferencia de puntos. En dos pruebas esta temporada el noruego protagonista de este artículo ha tenido problemas y ha sumado solo 10 de 60 puntos en juego, perdiendo mucho terreno que recuperó con las victorias mencionadas antes en Hell y Höljes. Si hubiese tenido un fin de semana regular en aquellas pruebas desastrosas la cosa estaría muy diferente, con casi total seguridad él sería el segundo clasificado (por lo menos) y la renta de su perseguido, inferior a la actual.
Artículos recomendados