Por enésima vez parecía que sobrevolaba el déja-vú en Pukekohe. Scott McLaughlin en pole, con el público volcado con el joven de las sandalias. En el Jandal Army -el club de fans del piloto neozelandés de Volvo- están orgullosos de él y no es para menos. A la tercera va la vencida, y ahora explico el porqué.
McLaughlin lucha, Van Gisbergen sentencia
Las dos salidas en Pukekohe han estado marcadas por la facilidad con que el segundo en parrilla sobrepasa al líder antes de la primera curva. Pero esto es Nueva Zelanda y McLaughlin saca la casta kiwi. ¡Whincup sale mejor pero McLaughlin le aguanta el interior! ¡En curva dos se pone líder Whincup, pero en la recta trasera McLaughlin se tira desesperadamente al interior! ¡Recupera el liderato! Cómo se ha defendido el de Volvo, que agrandaba el liderato a cada metro que recorría. Y Whincup que parecía como si un viento desconocido le frenara. ¡Jason Bright al muro! Coche de seguridad en pista.
El ganador de la carrera de ayer se veía envuelto en otro incidente, esta vez por pisar la zona sucia e irse directo al muro de neumáticos. Pudo recuperar el coche, pero los restos en pista obligaron a la aparición del coche de seguridad. Tan sólo duró dos vueltas, y la resalida de McLaughlin fue de libro.
Whincup veía como se escapaba McLaughlin, que rodaba en 1:03 mientras que el 1:04 dominaba la pantalla de tiempos. Shane Van Gisbergen, que había salido de forma genial se ponía segundo poco después. Y empezó la lucha entre neozelandeses. Van Gisbergen estuvo a la estela de la revolución de este año 2014 durante varias vueltas, pero al final se cansó y en la curva 8 le superaba con una apurada de frenada perfecta. A partir de ahí, el #97 de TEKNO Autosports seguía tirando sin cuartel mientras McLaughlin se peleaba con Whincup y con Winterbottom.
El #5 de Ford Performance Racing tenía ganas de llevarse la victoria. Estaba quinto pero era alcanzable siempre y cuando adelantara rápidamente a los rivales. ¡Pasa a Whincup en curva 8 y se va a por McLaughlin! Una, dos...tres... así pasaban las vueltas y Winterbottom estudiaba al entonces segundo clasificado. Al final, como Van Gisbergenm se hartó de esperar y coló el Ford en el hueco que habilitó McLaughlin. Era momento de despertar a la bestia.
Cuatro segundos y medio y nueve vueltas para el final. Medio segundo por cada giro debía recortar Winterbottom para llegar a Van Gisbergen antes del banderazo a cuadros. El neozelandés de TEKNO acusaba un desgaste de los neumáticos más crítico, y eso permitió a Frosty recuperar ese tiempo perdido. Por detrás, Whincup y McLaughlin se reencontraban en pista, y con invitados. Tander y Reynolds animaron la pelea que se acabó llevando McLaughlin.
En cuanto a los dos de delante, Van Gisbergen se estaba resintiendo mucho. Empezaba la última vuelta y Frosty estaba encima. Seis décimas en el penúltimo paso por meta. Tendría que aguantar. Y una noticia que motivó aún más a Winterbottom. Lowndes estaba décimo y el de Ford era líder provisional del campeonato. Unos puntos de más no vendrían mal. Cuando el Ford Falcon de Winterbottom entró en curva 5, el piloto vio claramente que no llegaría a sobrepasar a Van Gisbergen. Se quedó detrás ordenadamente -pero presionando a la vez, nunca se sabe- y permitió que Van Gisbergen se llevara una victoria merecida en casa.
"Esperemos que pueda mantener este puesto", declaraba Winterbottom al terminar. Los dos neozelandeses del podio con el mismo discurso. Gracias a los fans que se han acercado al evento. Y es que Pukekohe siempre tiene momentos para recordar. Como que Winterbottom se ponga líder del campeonato y que el kiwi preferido no se lleve la victoria.
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