El filtro de partículas en un coche diesel es fundamental, el mismo es conocido también por las siglas FAP o DPF; es una pieza o dispositivo que va colocado en el sistema de escape que se encarga de contener la expulsión gracias a su interior poroso, de las partículas de carbón livianas que son arrastradas por el gas de escape. En los diesel son más comunes ya que reducen significativamente el nivel de emisiones.
Cuando el filtro está lleno de estas partículas, el mismo, por un proceso automático llamado regeneración, se encarga de quemarlas. Para lograr esto cada cierto kilometraje, el coche inyecta mas carburante de lo normal, logrando elevar la temperatura de la explosión por arriba de los 600 ºC. El consumo aumenta ligeramente y el motor adopta un sonido más fuerte en ese momento, sin perder su funcionalidad o confort habitual. Con este proceso de auto regeneración como es llamado es que observamos hoy en día que los coches con tecnología diesel ya no sueltan esas nubes de humo negro como en el pasado.
¿Que coches utilizan este sistema?
En los tiempos actuales, todos los coches diesel que cumplen con las normativas vigentes como las Euro 5 y Euro 6 de anticontaminación lo utilizan. Coches de fabricación anterior al año 2006 no utilizan este sistema ya que por cuestiones de ley no son obligados. Los autos con motores a gasolina no vienen equipados con este sistema, pero se está tratando el tema con respecto a los que vienen equipados con un sistema de turbo, ya que la combustión a alta presión emana partículas igualmente peligrosas que la de los motores diesel. Es por ello que no se descarta la posibilidad de implementarlos en ellos para que puedan dar cumplimiento a la norma Euro 6.
Tipos de filtros de partículas
Los filtros de partículas existentes son dos, básicamente se dividen en unos con aditivos y otros sin aditivos.
Filtro de partículas sin aditivo
Es el más utilizado en la actualidad y va muy cerca del motor, normalmente luego del colector de escape y cercano al turbo. El recorrido muy corto entre el motor y el filtro de partículas permite que la alta temperatura de los gases quemen las partículas de forma mas rápida. La vida útil del mismo es la misma que la del coche. Una variante de este sistema es la incorporación de un inyector de gasoil antes del filtro de partículas permitiendo que la temperatura se eleve al grado necesario para la quema de las partículas.
Filtro de partículas con aditivo
Es utilizado por pocos fabricantes como lo es Peugeot. Este consiste en un dispositivo mas alejado del motor, por lo tanto se necesita un aditivo en el gasoil que al tener contacto con las partículas en el filtro se activa ayudando a quemarlas. Cada 100.000 kms aproximadamente se debe rellenar el depósito que contiene el aditivo.
Daños que puede tener el filtro de partículas
El problema más grande que puede sufrir el filtro de partículas es que, mientras se encuentre en el proceso de regeneración, se apague el motor, este proceso dura entre 15 y 20 minutos. El apagado en este ciclo por más de tres veces puede ocasionar que el mismo se obstruya por no quemar las
partículas; al ocurrir esto los gases no saldrán con facilidad y el motor puede fallar.
Su reparación es costosa, si no se puede lograr la regeneración del mismo. Arreglarlo podría costar aproximadamente unos 1.200 euros. Para poder pasar la ITV se debe resolver este inconveniente, de lo contrario el coche no aprobaría la misma.
¿De qué forma se puede conservar el filtro de partículas?
Existen cinco modos para lograr conservar y alargar la vida útil de un filtro de partículas, logrando que el mismo pueda funcionar casi la existencia del coche.
El primero de ellos, como ya lo analizamos, es no apagar el motor en el momento que se encuentra realizando la regeneración para así evitar obstrucciones en el sistema de escape. Otro de los puntos muy importantes es utilizar el lubricante recomendado el cual es bajo en cenizas, fosforo y azufre, siendo especial para no degradarse al momento de la inyección del carburante adicional para el quemado de partículas.
En tercer lugar e igualmente importante es que se respeten los lapsos de mantenimiento indicados por el fabricante del coche. En cuarto y quinto lugar tenemos dos recomendaciones que van de la mano, evitar trayectos cortos y salir a carreteras periódicamente; ya que al no alcanzar las temperaturas recomendadas el quemado de las partículas será deficiente, es por ello que se recomienda transitar por autovías al menos 30 minutos cada 1000 kms. La finalidad de esto es alcanzar temperaturas optimas para el funcionamiento del filtro y que las partículas no se adhieran en grandes cantidades en las paredes interiores. Se recomienda rodar a un régimen de 3000 revoluciones constantes para que el coche pueda realizar el ciclo de regeneración.
Existen otras formas, que evidentemente no son aprobadas por los fabricantes de coches, como lo son la reprogramación de la computadora del motor, para mejorar la adaptación de la regeneración del filtro a las formas en que el conductor utiliza el coche; esta practica pone en juego la garantía dada por el concesionario. Otra de las medidas en este caso, la más desesperada, es la eliminación del filtro de partículas, que en un primer momento traerá un alivio inmediato ya que el coche deja de presentar fallas, pero aparte de perder la garantía del mismo también se estará contaminando mas el medio ambiente y por lo tanto no se podría aprobar la prueba de ITV.
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