Si en parado ya nos transmite confianza, ¿Qué nos aguarda al ponerlo en movimiento? Para descubrir los detalles que acompañan al Volkswagen Passat, debemos conocer su mecánica, y es que la unidad que probamos cuenta con el 1.6 TDI de 105 CV, que está asociado a una caja de cambios manual de 6 velocidades.
Pese a que únicamente encontramos 105 CV bajo el capó, el Volkswagen Passat se mueve extraordinariamente bien, y podremos adquirir cierta agilidad en carretera si jugamos con la palanca de cambios.
La caja de cambios transmite un buen tacto y es muy agradable de llevar. Gracias a ella, conseguiremos un consumo excelente en ciclo mixto, ya que su desarrollo le delata una configuración pensada para una conducción eficiente.
En definitiva, es una mecánica pensada para viajar de forma cómoda y tranquila, si lo que deseamos es percibir mayores sensaciones y algo más de nervio, es posible que debas echar un ojo al 2.0 TDI de 140 CV.
Analicemos otros detalles
La configuración del chasis que encontraremos en este Passat está pensada para ofrecer el máximo confort a sus ocupantes. La suspensión se encuentra muy bien equilibrada, es cómoda y evita que el coche sufra balanceos excesivos, mientras que el tacto del pedal del freno es bastante suave y progresivo, evitando brusquedades para todo aquel que no esté habituado a frenos excesivamente sensibles.
En cuanto a su conducción por ciudad, debo mencionar que no hice más de 5 o 6 kilómetros a través de una, pese a ello, se muestra dinámico, sin que su tamaño sea un problema para pequeñas aglomeraciones de tráfico, circular a través de rotondas o salir ágilmente de semáforos o cedas.
Al salir a carretera, lo encontramos bastante tranquilo, es una mecánica que no tratará de sorprenderte por su rapidez, pero si por su suavidad. La sonoridad a 90 Km/h es realmente baja, así como su consumo, que nos sorprende con medias que rondan los 4,5 litros o menos según el ordenador de abordo.
Pasando a autovía, y con cruceros de 120 Km/h, el Volkswagen Passat se siente realmente cómodo, y es que este es el ambiente idóneo de esta mecánica. Con la sexta velocidad el coche va muy suave, sigue destacando por un consumo bajo, y no debemos subir el volumen de la radio en exceso debido a la excelente insonorización del habitáculo.
A la hora de adelantar si es cierto que es necesario reducir una marcha si circulamos con la sexta velocidad, pero esto es algo menor si tenemos en cuenta el resto de cualidades que nos ofrece el Volkswagen Passat en marcha.
En definitiva...
La unidad del Volkswagen Passat que hemos podido probar destaca por su confort en marcha, su bajo consumo y su buena insonorización. Es cierto que no encontramos reacciones nerviosas, aceleraciones fulminantes, pero es que esta unidad no está pensada para ello. Se nota que su hábitat natural son los largos viajes a velocidad de crucero, viajes con calma y tranquilidad, y por supuesto, viajes llenos de experiencias e ilusiones.
Especial agradecimiento al concesionario Centrowagen (concesionario oficial en Badajoz y comarca) por permitirnos la prueba que hoy ofrecemos.
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