Las reconocidas marcas Singer y Williams se han unido para dar vida a una reinvención del Porsche 911 de unas cuantas décadas atrás, produciendo una serie de 75 ejemplares. Todo esto nace a partir del pedido que Scott Blattner (propietario de un Porsche 911 964 de 1990), a Singer para realizar unas mejoras a su coche, quienes le propusieron un cambio sustancial al mismo.
La empresa norteamericana Singer se ha caracterizado por realizar trabajos de restauración y personalización de Porsche; quienes no dudaron en realizar una alianza con el departamento de ingeniería del equipo Williams de la Formula 1, quienes cuentan con las tecnologías más avanzadas del gremio; de este modo ambas podrían crear un modelo único de acuerdo a las exigencias de su cliente, creando un diseño sin igual, el cual posee características de época muy marcadas así como modernos componentes, lo que hacen la unión perfecta entre lo clásico y la tecnología de última generación; esta alianza cuenta con la cooperación del ingeniero Hans Mezger quien ha creado conocidos modelos dentro de la F1 y trabajo más de 4 décadas para la casa Porsche.
El Porsche 911 DLS (Dynamics and Lightweighting Study), trae detalles que lo hacen un coche único, principalmente su motor que es preparado por Williams Advanced Engineering, específicamente diseñado por Mezger, este cuenta con un propulsor bóxer de 4 litros, 24 válvulas, 4 árboles de leva, el cual alcanzara los 500 CV de potencia y velocidad máxima de operación de más de 9000 rpm, es refrigerado por aire, con un sistema de escape hecho en titanio creado para lograr un alto rendimiento. Con una caja manual de 6 velocidades hecha en magnesio, frenos Brembo los cuales han sido creados con pinzas monobloque, neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2 y amortiguadores EXE-TC.
Su diseño también fue modificado en este 911, teniendo resultado una carrocería de color verde absenta, con un interior en cuero naranja creando un contraste que hacen que este no sea un coche que pase desapercibido; retomando el estilo exterior otras de las modificaciones fueron llantas más anchas, entradas de aire, un suelo totalmente plano y demás detalles estéticos que dan un aire retro pero al mismo tiempo muy futurista, dando un resultado totalmente renovado. En cuanto a la aerodinámica también tuvo sus cambios necesarios en la forma de los alerones; la suspensión fue dotada por un sistema más ligero y optimizado que permitan sacar mejor provecho a un vehículo de esta categoría.
De este DLS solo planean producir 75 ejemplares, los cuales serán ensamblados en el Reino Unido, muy cerca del centro técnico de Williams. A pesar de que Singer no ha querido revelar cuál será el precio de este coche se espera que superar los 300.000 euros, este diseño sentara las bases para la línea que trabajara Singer en sus modificaciones futuras.
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