Es el vigente campeón y, pese a los problemas durante la pretemporada, es uno de los grandes favoritos a hacerse con el título de campeón de España de rallys de asfalto. Y es que Cristian García ha demostrado ser rápido siempre, al instante, con cualquier montura. Con un breve tiempo de adaptación, estamos seguros de que podremos ver al piloto aragonés peleando por ganar e incluso ganando. Con Rebeca Liso a su lado y el Ford Fiesta R5 de RMC, con el gran apoyo de Past-Racing y MMR Bikes, el campeón está listo para defender su corona.
El principal aval de Cristian García es algo imprescindible en el mundo de los rallys: la rapidez. Como ya avanzábamos en el párrafo anterior, el piloto maño es un as del volante. Ha sido capaz de volar con el Fiesta R2 de la Beca RMC, arrasando en su categoría. Desde el principio también fue rápido con el Mitsubishi EVO X de 2015, con el que consiguió el triunfo en la EVO Cup. Y para rematar, cuando el resto de pilotos apostaron por los R5, Cristian García fue requerido por Mitsubishi-Repsol para intentar asaltar el CERA. Y vaya si lo hizo.La pareja aragonesa arrasó en el CERA 2017, de cabo a rabo. Apenas dejaron nicho de éxito para el resto. Un pinchazo en Ferrol, otro y un toque en el Princesa, así como una salida de carretera en La Nucia les impidieron hacer pleno con el EVO X R4. Cristian García se llevó la victoria en el Rally Islas Canarias, en Adeje, Sierra Morena, Cantabria, Ourense, Llanes y Madrid, ya como campeón. Además hay que sumarle un cuarto puesto en el Princesa de Asturias, un séptimo en Ferrol y un vigésimo en La Nucia. El temporadón del campeón.
Así luce el Fiesta R5 preparado por RMC.
Rapidez sea cual sea la montura
La superioridad de Cristian García a los mandos del EVO X R4 no dejó indiferente a nadie. Entre la mayoría de halagos, llegaban también algunas críticas. Y es que parece que, en esto del automovilismo, cuando alguien arrasa es por el coche, nunca por la conducción. Pero el aragonés ha demostrado que no es así. Si ya hablábamos antes de sus éxitos con el Fiesta R2 y el Mitsubishi de la EVO Cup, podríamos hablar de las diferencias con su compañero de equipo. Alberto Monarri, un piloto hecho, no veterano pero sí con mucha experiencia, rápido también, no pudo seguir el ritmo de su compañero, al que superó únicamente cuando éste tuvo problemas. De hecho, el madrileño acabó el certamen sexto, a 150 puntos de su compañero.
Pero más allá de las especulaciones, y contando con la rapidez de Cristian García, además de su forma de gestionar los rallys pese a su juventud, estamos ante un más que firme candidato a la victoria. Partirá en igualdad de condiciones que sus rivales, con un R5, y luchará de tú a tú contra los gallos del nacional, todos ellos con mayor experiencia. Su gran defecto o problema de cara a este año puede ser la falta de rodaje con este tipo de vehículos. Es el único que nunca ha cogido un R5 en competición oficial y tendrá que acoplarse a la montura sobre la marcha y aprovechar los escasos kilómetros de test que ha hecho y que podrá hacer.
Así pues, el campeón está listo para repetir éxito. Las ganas del campeón, de la juventud, de la novedad, de la ilusión y las ganas por confirmar que ser campeón de España no es moco de pavo, de demostrar que lo puede hacer con otra montura. "Al final cogemos un R5 que era lo que queríamos", remarcaba Cristian en la entrevista concedida a Motor y Racing. Vencer, convencer y demostrar.
Los test de Cristian García con el Fiesta R5.
Fuente de las fotos: Mitsubishi-Repsol media y Cristian García página de Facebok
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