El fin de semana del 1 y 2 de octubre de 2016 nos ha dejado muchas cosas interesantes que destacar. La lluvia, las descalificaciones, los toques, la gran cantidad de aficionados presentes en Bikernieki... Podríamos sacar muchas claves de por qué ha sido un fin de semana excelente para aquellos que han podido disfrutar en primicia de este deporte de motor que tanta expectación crea en cada prueba. Mattias Ekström sale de Riga con el Mundial en la mano prácticamente tras el error de Petter Solberg en la segunda carrera del fin de semana. El noruego, sin quererlo, le ha puesto a su máximo rival la corona de campeón en bandeja de plata.
De cara a Estering nada parece que vaya a cambiar, Ekström tiene 27 puntos de ventaja sobre Johan Kristoffersson y si aumenta su renta con el segundo, sea quien sea, a 31, será matemáticamente Campeón del Mundo. Esperemos que la emoción nos dure hasta la última prueba, ya en Rosario (Argentina). Antes, tenemos que enseñaros las cinco claves de la décima prueba del calendario, la disputada en Riga. Letonia debutaba en este campeonato del mundo y nos ha dejado muchas cosas interesantes, las cuáles vamos a resumir en cinco momento clave del fin de semana.
1-Petter Solberg, descalificado y derrotado
Sin duda el punto de inflexión fue el momento en el Petter Solberg fue descalificado de la Q2. El noruego empujó con su Citroën DS3 al Audi S1 de Mattias Ekström por detrás y aprovechó para adelantarle. Justamente, los comisarios decidieron enseñarle la bandera negra y dejarle sin sumar puntos; esto supondría no llegar a semifinales y ni siquiera a estar entre los 16 primeros, que tienen derecho a puntos.
El mundial pasó en dos pruebas de estar en su mano a que otro piloto lo pueda ya tocar con la punta de los dedos. Ese toque con precisamente el más beneficiado supuso la rendición de un campeón. El dos veces, consecutivas, campeón del mundo de Rallycross anunciaba en televisión: "El Mundial está perdido". Duras palabras para alguien que con su carácter ganador ha enamorado a tantos aficionados al rally en primer lugar y al Rallycross en los últimos años.
Aún quedan esperanzas para Solberg pero pasan porque Mattias Ekström sume cero puntos en Estering y él, a ser posible, los 30 en juego aunque con algunos menos también habría pelea en la última prueba por ser el campeón. Esto, por supuesto, parece casi imposible debido a la regularidad del sueco, que no ha bajado de los 15 puntos en ninguna prueba en este 2016.
2- Los aficionados
Letonia debutaba, Riga debutaba, Bikernieki debutaba y algún piloto también. Pero los pilotos no son importante, no en esta clave del Rallycross en Riga. Por primera vez el país colindante con Rusia, Lituania, Estonia y Bielorrusia tenía la suerte de ser sede de una de las pruebas del Campeonato del Mundo de Rallycross, además de poder ofrecer también pruebas del Campeonato de Lites, Touring Car y el Campeonato Europeo. Espectáculo puro y duro durante horas y horas. Una carrera tras otra durante dos días de acción máxima.
La cantidad de aficionados a este deporte de motor con respecto a otros como al Fórmula 1 o los propios Rallies es, aún, mínima. El proceso de expansión aún no se ha completado y mucha gente desconoce todavía el subidón de adrenalina que generan estos vehículos de 600 caballos de potencia que manejan pilotos como Sébastien Loeb o Ken Block entre muchos otros.
Con el miedo en el cuerpo de los organizadores, la gente no falló a la gran cita. Se presentaron más de 30.000 aficionados a ver las carreras y no solo eso, durante el domingo, con una fuerte lluvia, ¡nadie se marchó de su asiento! Pudimos ver a una gran cantidad de aficionados con un chubasquero traído de casa, peleando así contra las adversidades para no perderse ni un segundo del Mundial de Rallycross y el resto de disciplinas. Sin duda Riga es una ciudad en la que el Rallycross gusta y durante los próximos años seguro que vemos aumentar aún más el número de incondicionales en las gradas de Bikernieki.
3- Mundial al rojo vivo
El Mundial de pilotos está casi decidido. Casi. El que no lo está ni por asomo es el de Constructores. Este fin de semana en Riga ha dejado la pelea por el título de escuderías al rojo vivo ya que únicamente ocho puntos separan al primero del segundo. El equipo de Mattias Ekström, EKS, ha visto reducida su ventaja con el Team Peugeot Hansen en 13 puntos tras el flojo fin de semana de Toomas Heikkinen respecto del casi perfecto de Sébastien Loeb y Timmy Hansen.
El ganador de la prueba sumó 26 puntos de los 30 posibles y su compañero de equipo, 22. Por el otro lado Mattias Ekström se anotó 24 tantos mientras Toomas Heikkinen hizo tan solo 11. Este además fue el único que no estuvo presente en la final. Sin duda estos resultados le dan emoción al mundial por equipos.
La regularidad de los dos Peugeot 208 WRX ha demostrado poder hacerle frente al actual líder del mundial, que aporta más de la mitad de los puntos aunque bien es verdad que ni de lejos podría mantener la primera plaza si corriese él solo. Por detrás ya queda Volkswagen RX Sweden a 80 puntos de Peugeot y 18 por encima de Hoonigan Racing Division, al que realmente mantiene en la cuarta plaza Andreas Bakkerud (él solo tiene cinco puntos más que el quinto, World RX Team Austria).
Sea como fuere quedan muchos puntos en juego, concretamente 112 (el máximo a conseguir por un mismo equipo en una prueba), y por delante hay dos pruebas con solo ocho puntos de distancia entre ellos, por lo que todo puede pasar. ¿Serán más rápidos los Peugeot 208 o los Audi S1?
4- ¡Te tocaba, Loeb!
Pues sí, le tocaba ya. A Sébastien Loeb lo hemos visto en el podio esta temporada pero nunca en lo más alto de él. En Bélgica y en Suecia obtuvo dos segundos puestos y en Francia, un tercero. Pero nunca había ganado. Y en Riga le tocó. Sébastien Loeb se impuso a todos con una gran salida que le colocó en primer lugar antes de llegar a la primera curva y en ningún momento de las seis vueltas perdió el liderato.
Que un nueve veces campeón del mundo de rallies no hubiese ganado una carrera se hacía raro y por fin llegó la ansiada victoria. A la décima fue la vencida para Loeb y su Peugeot 208 WRX con el número 9 en el lateral y la bandera francesa en el techo. De los seis primeros clasificados era el único sin un trofeo de campeón y ahora, por fin tiene uno.
Esta victoria es un extra de motivación de cara a Estering ya que el galo querrá repetir su excelente actuación durante todo este fin de semana en Letonia. Como toda droga, siempre se quiere un poco más, y ganar es una droga, y muy potente. Sébastien saldrá en Estering a por todas y seguro que podremos verlo entre los primeros clasificados, quién sabe si no nuevamente en la primera posición de los 29 participantes para dicha prueba en territorio germano.
5- Despedida a lo grande de Timo Scheider y Guy Wilks
Sin duda estos dos pilotos, Timo Scheider y Guy Wilks, han sabido despedirse a lo grande del Campeonato del Mundo de Rallycross 2016. Ninguno volverá a su equipo, salvo sorpresa máxima, esta temporada. All-ink.com Münnich Motorsport correrá con Tommy Rustad en Estering y JRM Racing únicamente con el Mini Countryman de Guerlain Chicherit. En Riga ambos demostraron las malas decisiones de sus equipos de dejarlos ir.
Empezamos por el germano. Este, afincado en el peor equipo de los que participan en el Mundial de Constructores, tenía la no muy difícil tarea en su llegada de superar al piloto y dueño del equipo, René Münnich. Si en otras pruebas ya lo hizo, ahora incluso mejorándose. De ser 17º en Barcelona y no llevarse puntos ha pasado a quedar en una espectacular cuarta plaza en una de las semifinales de Riga. Su Seat Ibiza utilizó un alerón especial para la ocasión y pareció irle de perlas. El teutón con el número 44 en su coche quedó 8º en la fase clasificatoria con increíbles resultados que lo mantuvieron en la primera parte de la tabla, algo casi imposible para el vehículo que llevaba. Su excelente conducción le llevó a superar incluso a Davy Jeanney y Robin Larsson en su semifinal.
El otro piloto no tuvo un resultado tan impresionante pero sí igual de meritorio. Guy Wilks no llegó a las semifinales, es más, terminó en 14º lugar en la clasificatoria. Pero eso conduciendo un Mini Countryman es increíblemente importante. Más aún si el coche británico está en proceso de mejora para ponerse al nivel del resto de vehículos de la competición. Esa 14º plaza le hace sumar al inglés tres puntos que, aunque parecen pocos, son tres más de los que esperaban sumar tanto él como su equipo. Una increíble Q3 en la que fue 6º le permitió ganar muchos puntos, colocándole por delante de pilotos como Anton Marklund, Ken Block y Niclas Grönholm, superiores a él en vehículo y habilidades de conducción.
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