Según las palabras de este comisario y a través del comunicado oficial emitido por la prueba, Sébastien Milan perdía el control del 207 S2000 en la tercera especial de la prueba, alrededor de las 18h del sábado. A pesar de los esfuerzos de los especialista, el piloto murió una hora más tarde cuando ya había sido evacuado de la zona del accidente. Aunque la respuesta de los sanitarios fue muy rápida, finalmente no pudieron hacer nada por la vida de Sébastien Milan, un piloto con bastante experiencia que había competido de manera más o menos regular en la Copa de Francia de Rallies.
En el accidente, una vez más el cúmulo de circunstancias fue la clave para que tengamos que hablar de esta fatal desgracia, puesto que según afirman algunos aficionados que estaban en la zona siguiendo la prueba, el 207 S2000 de Sébastien Milan impactó contra una zona de árboles por la parte del conductor y a la altura de la puerta del piloto, lo que finalmente fue determinante para que el francés perdiese la vida, mientras que su copiloto Patrice Ponchon por el contrario saliera prácticamente ileso del brutal accidente en esta prueba, que fue detenida de inmediato.
Mala suerte
Un suceso desafortunado que ha acabado con la vida de un piloto como Sébastien Milan, pero también de un hombre casado y con hijos comprometido con el mundo de los rallies tanto en su rol de piloto como en otros ámbitos, ya que colaboraba en la organización de alguna otra prueba en Francia. Como es lógico, Motor&Racing se une a las muestras de apoyo y condolencia a la familia, amigos y a todo el mundo de los rallies.
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