Por ello, los dos vehículos que alineará el equipo alemán y que estarán formados por el piloto referencia y líder del equipo, el francés Sébastien Ogier, y por la combinación de Andreass Mikkelsen y Kevin Abbring, que estarán peleando por conseguir esa plaza, no optarán a puntuar en cada prueba.
Razones lógicas
Está claro que Volkswagen sabe lo que quiere en cada momento y por ello es capaz de renunciar a conseguir un primer triunfo en su regreso, a pesar de disponer del material y de los pilotos necesarios. Esta negación de luchar por el campeonato, no es más que el producto de poder tener un programa de pruebas con el Polo R WRC sin ningún tipo de limitaciones, impuestas por la FIA al estar participando en un campeonato de los que dan soporte al Mundial.
Por lo tanto los objetivos de la marca alemana son claros: conseguir un coche competitivo lo antes posible, a través de un programa de pruebas extenso, para poder desembarcar en el WRC con garantías de luchar cara a cara contra el resto de marcas y participantes.
Artículos recomendados