En la edición de 2010 pudimos ver una auténtica batalla entre dos grandes de Le Mans, Peugeot con su 908, y Audi con su R15.
Audi ha ganado Le Mans en nueve ocasiones desde el año 2000, en parte porque ha hecho máquinas al más alto nivel, y en parte porque no ha tenido rivales serios, a excepción de los dos últimos años, en los que Peugeot le ha plantado cara duramente, ganando la edición de 2009 y poniendo las cosas difíciles en 2010. El resultado de esta rivalidad se traduce en el
El R18 cuenta con un nuevo motor de 3.7 litros V6 TDI unido por primera vez a una caja de cambios con seis relaciones. Los cilindros están colocados con una amplitud de 120 grados, lo que rebaja el centro de gravedad, mejorando así el comportamiento del vehículo. Las nuevas normas implantadas por el Automobile Club de L'Ouest (ACO) hacen que los fabricantes opten por propulsores más pequeños, de esta manera los motores son menos pesados, en este caso, el V6 TDI es aproximadamente un 25% más ligero que su predecesor, el V10 TDI.
Los colectores de escape se han movido de su posición en los flancos derecho e izquierdo del motor para situarse en las dos bancadas de cilindros, mejorando así los flujos de aire a través del vehículo. Tiene un solo tubo de escape, lo que le hace ser más ligero. Este motor es técnicamente más avanzado que los de su generación, además sirve para incluir las mejoras técnicas que emplea en el desarrollo y producción de motores para modelos de calle. Este modelo está diseñado con vistas a una variante híbrida, siguiendo el ejemplo de otros coches que participan en la carrera.
Aerodinámica muy trabajada
Lleva un turbocompresor situado encima del motor, que respira gracias a la toma de aire del techo. De este modo Audi asegura que aprovecharán mejor la presión aerodinámica que existe cuando se rueda a grandes velocidades sin perder potencia. Este último aspecto, la aerodinámica, está realmente cuidado, el trabajo en el túnel de viento ha tenido que ser muy duro, las formas están muy pensadas, y destacan elementos como la gran aleta de tiburón. El monocasco en fibra de carbono es de una única pieza, dándole así más rigidez, aunque la fabricación del mismo es muy compleja. La suspensión es muy similar a la de sus predecesores. Las ruedas tienen el mismo tamaño en ambos ejes, esto se ha hecho para acabar con los problemas de subviraje padecidos en modelos de años anteriores. La iluminación está hecha integramente con tecnología LED.
Habrá que esperar a los días 11 y 12 de junio para ver de lo que es capaz este modelo, cuando tengan lugar las 24 Horas de Le Mans 2011. En los test oficiales llevados a cabo días atrás, el R18 ha demostrado ser el más rápido, aventajando en unas décimas a su máximo rival, el Peugeot 908 HDI, también con motor diésel. Otros rivales pueden ser los Pescarolo o los Aston Martin, ambos con motor de gasolina, aunque la verdad es que lo tienen muy difícil para seguir el ritmo a los diésel. En cuanto a la fiabilidad, algo clave en las carreras de resistencia, el Audi no ha dado problemas en los test. Esperaremos impacientes para ver la histórica prueba y a estos modelos en acción.
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