De hecho, una delegación de ambas instituciones visitaron el pasado 8 de abril las instalaciones del fabricante, que se encuentran en Rímini, Italia. El propósito de dicha visita era el encuentro con los nuevos propietarios de la firma italiana, un grupo suizo que además de reestructurar la estrategia de la marca a nivel de producción, también ha querido adentrarse en el mundo de la competición. Sin embargo, lo que no cambia es que Bimota se trata de una marca de producción limitada y por lo tanto la producción de las unidades necesarias de la BB3 van a un paso tranquilo.
Para satisfacer las normas de homologación de la FIM, los representantes de las marca explicaron las previsiones anuales de producción de motocicletas y concretamente de este modelo. Sin embargo, como decimos se tratan de pasos a corta escala por lo que aunque la delegación de Dorna y FIM ya pudieron 'conocer' las primeras unidades producidas, así como recoger los componentes requeridos que pasarían las inspecciones técnicas durante los fines de semana de competición.
Zanjar la polémica
Cabe recordar que cuando se dio a conocer la relación entre el Alstare Team, estructura dirigida por Francis Batta y Bimota, surgieron discrepancias en cuanto al proceso de homologación. Por ello, Dorna y FIM han aplicado a rajatabla el artículo 1.2.2 del Reglamento de Homologación que sigue el Campeonato del Mundo de Superbikes y por ello el equipo podrá competir desde MotorLand pero no podrá sumar puntos hasta que no llegue a las 125 unidades producidas en un plazo de cuatro meses. Al final de este periodo de tiempo, una nueva delegación de la FIM y Dorna volverán a visitar las instalaciones de Bimota.
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