Un test que sólo ha durado una jornada, pero ha sido muy especial para Max Biaggi. El regreso a la pista de Vallelunga sin duda tiene un significado especial para el piloto italiano, ya que en este trazado el 'corsario' ha vivido grandes momentos y ha sido uno de los principales escenarios en los que ha dado sus primeras pasoso en el mundo del motociclismo. También tiene recuerdos emotivos de esta pista puesto que en este mismo escenario anunció su retirada oficial a finales de 2012, año en el que consumó su segundo título con la marca de Noale.
"Bueno, esto es como un retorno al pasado para mí. Aquí, hace años, hice el anuncio de que ponía fin a mi carrera deportiva. Obviamente, tengo sensaciones contrapuestas. Por un lado existen las ganas de subirme a la moto, y por otro, el recuerdo de que aquí cerré un capítulo de mi vida, aunque con una sonrisa. Es un recuerdo dulce" afirmaba Max Biaggi junto antes de comenzar la jornada de test programada por el equipo Aprilia Racing Red Devils.
Buenas sensaciones
Dedicado este año a su trabajo como comentarista televisivo en Italia, Max Biaggi también mantiene, como ya hemos comentado, un papel importante como piloto probador de la fábrica de Noale. A lo largo de los últimos meses además de subirse en la RSV4 RF, también ha probado el prototipo de MotoGP. Respecto este test, el italiano afirmaba: "Aquí he trabajado para ayudar con la Superbike. Estamos llevando adelante el programa de desarrollo, que prevé algunos pequeños cambios. En Tailandia habrá una incógnita con las altas temperaturas y podrían surgir algunos inconvenientes. Por esta razón, estamos tratando de prevenirlos".
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