Bien es cierto que durante las primeras etapas se mostró con ritmo de sobra para mantenerse entre los diez primeros con el Citroën DS3 WRC del Team Qatar, heredado de Nasser Al-Attiyah, que estaba inmerso en los Juegos Olímpicos. Sin embargo, a partir del tramo octavo del Rallie de Finlandia las cosas comenzaron a empeorar para el australiano y de nuevo una serie de problemas en la segunda jornada le hicieron caer en picado en la clasificación final de Rallie finlandés.
Finalmente, Atkison terminó en la posición trigésimo novena aunque una vez superados los problemas volvió a encontrar el ritmo. De hecho, se mostró muy competitivo en los tramos finales del Rallie de Finlandia pero su salida de carretera en el TC8, la trampa que le hacía perder 16 minutos tras quedarse atascado en un árbol y la suspensión rota en el TC10 aguaban todas sus posibilidades.
Dolido y esperanzado
"Un error nos costó un buen resultado, pero yo estaba contento con mi velocidad, después de cuatro años sin correr aquí", dijo Atkinson. "Claro que podría haber sido más rápido si hubiera tenido más tiempo en uno de estos coches. Mi atención se centra en el título de Asia Pacífico este año, pero me gustaría volver al WRC. Es el pináculo del deporte y he demostrado que merezco estar aquí. No sé cuando estaré de vuelta en el WRC, pero espero que sea pronto y con Citroën, si es posible" afirmó el australiano.
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