En primer término, Ford como ha mantenido desde el principio colaborará con M-Sport para suminstrarle en una estrecha relación todo lo necesario para desarrollar el R5 y el R2 así como para evolucionar el Fiesta WRC. Prueba de ello es que la marca estadounidense ya está manos a la obra con el nuevo restyiling del modelo más potente que ahora gestiona en teoría en solitario el preparador británico.
Así lo resumen Gerard Quinn, jefe deportivo de Ford en Europa: "Continuaremos nuestra relación en el aspecto técnico, es fundamental para M-Sport y para nosotros tanto en el WRC, en el desarrollo del R5 y el R2 y en otros productos. M-Sport debe contar con la última tecnología y contará con nuestro apoyo en este aspecto".
Palabras y nombres
Sin embargo, esta cooperación tecnológica que a términos reducidos se podría llamar "apoyo de fábrica" y que se mantiene para poder asegurar la competitividad de los Fiesta RS WRC, no tendrá esa representación a términos de nomenclatura. Ford tras tomar la decisión de salir del WRC debe desvincular su nombre de manera directa del equipo por lo que Ford ha confirmado que su nombre no podrá ser utilizando como parte del equipo.
Esta aclaración viene a tenor del intento de Malcolm Wilson de negociar con Ford para poder utilizar el nombre de la marca con las facilidades que ello representa. Sin embargo, la nueva evolución del Ford Fiesta implica un paso en lo que respecta a la norma estricta entre fabricantes y preparadores a favor de la unión tecnológica mencionada anteriormente, pero Ford no quiere lucir su nombre al lado de Catar: "Hay que hacer ver que nos hemos ido completamente del WRC y nuestro nombre no puede estar unido a los patrocinadores de M-Sport en el Mundial de Rallies".
Fuente: Rallye-Magazin
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