Los amantes de los rallys de grava están de enhorabuena. Tras el aperitivo mundialista entre el asfalto, el hielo y la nieve, el Rally de México da el pistoletazo de salida a la temporada de tierra. El grueso del campeonato está compuesto por rallys de esta superficie y es ahí donde se forja el título de campeón del mundo. De momento, en México, los alicientes serán enormes. Habrá que ver si alguien es capaz de romper la igualdad máxima que ha habido en Montecarlo y Suecia y también habrá que comprobar cómo va el trabajo de los equipos con los nuevos WRC.
Un rally contra los elementos
Y es que el tiempo transcurrido entre Suecia y México no ha sido de parón total. Todos los equipos oficiales del WRC han dedicado estas semanas a poner a punto sus vehículos de cara a la 'nueva' superficie y, como no, a la altura. Los que mejor hayan trabajado en sus reglajes sobre tierra serán los que más opciones tengan de salir triunfadores en Guanajuato. Eso sí, también habrá que luchar contra la altura y el calor que se espera durante el transcurso de la prueba centroamericana.Además de entre los Ogier, Latvala, Paddon, Neuville y Sordo, la lucha será de los pilotos contra las circustancias. Como ya hemos avanzado, la altura es un enemigo muy a tener en cuenta, tanto en el físico de los participantes como en la potencia de las monturas. En altitud -la prueba llega a rozar los 3000 metros-, los motores pierden el veinte por ciento de su potencia, con lo que la reducción es notable. Además, el calor. Sordo ya lo ha advertido en diversas declaraciones previas: le afecta más el calor que la altitud. Por cierto que, debido al calor, solo se usarán neumáticos de compuesto duro, salvo que llueva. Habrá que ver qué marcas y qué pilotos saben acoplarse mejor a estas situaciones extremas.
Espectáculo y dureza
Pero ya hablando del recorrido, la organización mexicana apuesta por el espectáculo. Así arrancará el rally, con dos pasadas al tramo espectáculo de Ciudad de México (1,68 km), hoy jueves. En la jornada del viernes se correrán dos tramos típicos, el Chocolate, de casi 55 kilómetros, y Las Minas (19,5 km) que se repetirán por la tarde. La jornada se cerrará con el tramo urbano por los túneles de Guanajuato (1,09 km) y dos pasadas a la superespecial del Autódromo de León (2,3 km).
El sábado llega la jornada con más tramos del rally. Por la mañana tres tramos y su consiguiente repetición en el bucle vespertino: Media Luna (27,4 km), Lajas de Oro (38,31) y El Brinco (10 km). Cómo no, el día volverá a acabar con espectáculo: los participantes deberán afrontar otras dos pasadas a la superespecial del Autódromo de León. Y para el domingo, el rally se decidirá con dos tramos. La Calera (33 km) y Derramadero (22 km), que será la Power Stage que aporte puntos extra a los participantes.
El orden de salida vuelve a ser vital
En cuanto a los favoritos, es uno de los rallys más impredecibles del campeonato debido a factores ya mencionados como las altas temperaturas o la altitud. Eso sí, la posición de salida también será clave. Es por ello que, visto el potencial del Hyundai y de su pilotaje, Thierry Neuville puede ser uno de los grandes favoritos para la victoria. El belga se ha mostrado como el más rápido, tanto en Montecarlo como en Suecia. Solo errores puntuales le han alejado, y mucho, de la victoria. Parte retrasado y tendrá pista limpia, al igual que otro piloto de nivel como Kris Meeke (Citroën) y Hayden Paddon (Hyundai), especialista en tierra.
Por delante, perjudicados por tener que abrir pista, los dos últimos ganadores de la prueba. Sébastien Ogier (Ford) se impuso en 2015 mientras que Jari-Matti Latvala (Toyota) ya venció a su entonces compañero en Volkswagen en 2016 debido a la posición de salida. Justo tras ellos partirá otro de los especialistas sobre tierra, el rapidísimo Ott Tanak (Ford) que tiene coche y potencial para vencer al fin a los gallos. Y entre medias encontramos a Dani Sordo (Hyundai). El piloto cántabro basa en la regularidad su éxito y se ve con opciones de podio. No partirá en la mejor posición de salida pero tampoco en la peor para buscar su primer podio en la prueba mexicana.
Los jóvenes Craig Breen, Stephane Lefebvre (Citroën) y Elfyn Evans (Ford), junto con Juho Hanninen (Toyota), Valery Gorban (Mini) y Lorenzo Bertelli, que estrena un agresivo Fiesta WRC completan la nómina de doce WRC dentro de una lista de inscritos pobre: solo 29 participantes. Es habitual debido al importante gasto que supone transladar vehículos y material desde Europa, sede del grueso de los pilotos del Mundial, hasta territorio americano.
Skoda vs Ford, tercer asalto en el WRC2
En el WRC2, la inscripción también se ve afectada por el tema económico. De entre los gallos, se prevé una bonita lucha entre Skoda y Ford, de la mano del líder Pontus Tindemand frente al francés Eric Camilli. Habrá que poner un ojo en los mexicanos, muy conocidos en nuestro país, como Benito Guerra (Skoda), copilotado por el español Dani Cué, y Ricardo Triviño (Citroên).
Neuville aprieta desde el Shakedown
Por cierto que en el Shakedown, disputado el miércoles, Thierry Neuville ya ha confirmado que sigue yendo muy pero que muy fuerte. El belga esperó hasta la última pasada para hacerse con el mejor crono, superando a Sébastien Ogier y Kris Meeke. El español Dani Sordo finalizó sexto. Entre los WRC2, Eric Camilli puso al Ford por delante en el tramo de prueba, por delante de Benito Guerra mientras que Tindemand marcó el cuarto mejor tiempo.
Una historia joven pero intensa
El Rally de México es una prueba relativamente joven. La competición centroamericana celebrará su edición 23 en este 2017, aunque forma parte del Mundial de Rallys desde 2004, convirtiéndose en una cita habitual del WRC. Hasta el año 2000 estuvo destinada a pilotos americanos: mexicanos, estadounidenses, jamaicanos... pero a partir del cambio de siglo adquirió una dimensión más internacional. De hecho, Harri Rovampera ganó en 2002 -todavía no formaba parte del Mundial- a bordo del Peugeot 206 WRC.
Markko Martin (Ford Focus WRC) fue el primer vencedor en el México mundialista. A él le siguió Peter Solberg (Subaru Impreza WRC) y la hegemonía de Sébastien Loeb (Citroën) con seis victorias que bien podrían haber sido consecutivas, pero la prueba salió del certamen internacional en 2009 -cuando ganó Manfred Stohl- para volver al año siguiente. Tras la retirada de Loeb, el testigo lo recogió el otro 'Seb', Ogier (Volkswagen), quien se impuso en 2013, 2014 y 2015. En 2016 fue su compañero Jari-Matti Latvala el que se impuso en la prueba que se ha hecho con un gran hueco en el WRC.
Fotos del Shakedown del Rally de México | Fuente: Rally de México official media.
*Excepto foto de Loeb y Elena - Fuente: Getty Images.
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