Sin embargo, esta pelea entre las marcas ha llevado al uso de materiales ligeros para cumplir con la normativa que fijaba en 1.200 kilogramos el peso mínimo que debe tener cualquier unidad de este R5 y aunque el Ford Fiesta R5 ya ha sido homologado recientemente, las marcas tendrán que acometer una última modificación en este aspecto ya que la FIA ha decidido aumentar el peso en 30 kilogramos fijando el límite en 1.230 kilogramos. Con ello, se intentará evitar este uso de materiales y que los costes de gestación de estas máquinas sigan muy por debajo de los carísimos S2000.
Los más pesados
La decisión de subir el peso en 30 kilogramos se ha tomado en el último Consejo Mundial del Motor de la FIA, una decisión que quizá llega algo tarde puesto que como hemos dicho el R5 de M-Sport está ya homologado y las primeras unidades ya están en mano de equipos privados. Sin embargo, esta medida se convierte en necesaria para que no se empiecen a disparar los precios desde el principio de la vida de esta nueva categoría.
Con estos 30 kilogramos de más y su peso final de 1.230 kilogramos los R5 serán los más pesados de los coches que surquen las pruebas del WRC y ERC puesto que según reglamentación FIA los WRC 1.6 Turbo, los Regional Car (RRC) y los S2000 tienen un peso inferior. Aun así, se espera que la igualdad con estos dos últimos sea manifiesta para los R5.
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