En primer lugar llega la pareja de Citroën con todo resuelto. El equipo francés aterriza en tierras italianas como campeón de constructores y Sebastien Loeb con su novena corona bajo el brazo. Esto implica que Sebastien Loeb que a final de temporada abandonará el WRC y Mikko Hirvonen, que ya ha cuajado en pasados años grandes actuaciones en Italia podrán ir al ataque de manera total.
Por otro lado los pilotos de Ford intentarán conseguir la victoria para despedirse con el mejor sabor posible ahora que la marca americana abandonará el WRC y dejará a M-Sport solo en una nueva aventura. En lo que respecta a Jari-Matti Latvala, el finlandés querrá luchar por la que podría ser su última victoria sobre tierra junto a Ford ahora que ha fichado por Volkswagen y por su parte Petter Solberg que se está jugando su futuro junto al proyecto aún indeterminado de M-Sport.
Ott Tänak y Evgeny Novikov serán una de las alternativas a los cuatro cabezas visibles aunque uno de los que más se juegan es Mads Ostberg, que podría tener su futuro unido al equipo fuerte de M-Sport o incluso a Prodrive. Sin Dani Sordo, por su parte el preparador británico no hará acto de presencia por lo que Mini solo tendrá en competición a Chris Atkinson y Paulo Nobre, que buscarán sumar un buen resultado. Sebastien Ogier y Andreas Mikkelsen con los S2000 de Volkswagen serán otros dos de los pilotos destacados.
Guerra PWRC
Con todo decidido y a la espera de espectáculo, donde si veremos una lucha intensa será en el PWRC, donde Benito Guerra con el Mitsubishi Lancer Evo X llega como líder con un margen de 15 puntos sobre Michal Kosciuszko. En tercera posición y a tan solo siete puntos de Michal, el tercer clasificado Valeriy Gorban todavía tienes cosas que decir. Veremos cómo termina la clase de producción, pero la lucha está servida.
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