La semana pasada os contábamos que Jost Capito, quien fuera director de la división deportiva de Volkswagen desde que comenzaron a preparar su entrada en el Mundial de Rallies, optaba por apartarse de la misma para regresar a la Fórmula 1, recalando en la escudería McLaren.
De ese modo, el gerente alemán, con gran experiencia en el mundo de la automoción y la competición, dejaba tras de sí tres títulos mundiales (tanto de constructores como de pilotos con Sébastien Ogier) y los cimientos del cuarto, además de otros éxitos en diferentes disciplinas, concretamente, el rallycross y los circuitos.Reestructuración natural
Hace unos días, el fabricante con sede en Wolfsburgo anunciaba el nombre de su sucesor: el belga Sven Smeets, de 44 años, especialmente famoso por haber sido el inseparable copiloto de Freddy Loix a lo largo de diez temporadas (de 1995 a 2004). Posteriormente, junto a François Duval, llegaría la única victoria mundialista para ambos con motivo del Rally de Australia, que cerraba la campaña.
Ese sería el broche de oro a la carrera deportiva de Smeets, pues, concluida la prueba, daba por terminada su andadura en el asiento de la derecha. Tres años después pasaba a ocupar el puesto de mánager en la misma estructura donde se había retirado, Citroën Racing. Derrotados por Ford las dos temporadas anteriores, obtenían sus últimos campeonatos de constructores hasta la fecha, cinco consecutivos.
Fue entonces, a mediados de 2012, cuando el belga decidía unirse a las filas de Volkswagen Motorsport, adoptando el mismo rol que en el conjunto de los dos chevrones (a quienes, por cierto, conseguirían desbancar). La formación, que en aquel momento aún se estaba gestando, apostaba así por un hombre con una larga trayectoria en la especialidad, no solo «desde dentro», sino también a nivel directivo.
El 1 de septiembre, ya ausente Capito, Smeets se convertía en el responsable de las actividades competitivas de la marca. Este cambio en el organigrama ha sido la secuela de otros; en junio, su compatriota François-Xavier Demaison (47 años) era ascendido a director técnico, pasando a encargarse de todos los nuevos proyectos automovilísticos de Volkswagen, mientras que Donatus Wichelhaus (54) tomaba las riendas del desarrollo de motores.
El renovado equipo, actualmente sumido en el perfeccionamiento del Polo R WRC 2017, tiene el listón muy alto de cara a la nueva era del Mundial de Rallies, con grandes cambios en el reglamento y más marcas involucradas, aunque no cabe duda de que los germanos parten desde la mejor posición. Pronto os hablaremos de la próxima temporada y la prometedora generación de vehículos que traerá consigo.
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