En la salida, que fue lanzada, no se produjeron incidentes. Tom Coronel, que partía décimo, se colocó sexto en el curso de la primera vuelta.
Tarquini tomó el mando, seguido de Monteiro y Michelisz, a cargo de defender a los coches japoneses de Yvan Muller, en cuarta posición.
Pepe Oriola caía a la duodécima posición, que lograba recuperar hasta la décima, mientras que Fernando Monje salía bien y se colocaba decimoctavo.
En la segunda vuelta, Tom Chilton, con el coche reparado, se salía en el segundo sector, viéndose obligado al abandono. Fernando Monje, por su parte, lograba remontar posiciones para colocarse decimoquinto.
Por detrás, había una bonita lucha entre Thompson y Huff, que había partido decimoséptimo, y lograba superar al de Lada. Desafortunadamente, una vuelta más tarde, el vigente campeón del mundo se salía por la grava, perdiendo varias posiciones.
En un circuito muy intenso, los neumáticos empezaron a sufrir, y Pepe Oriola perdía la estela de Alex MacDowall, que le precedía. Por fortuna para el piloto español, todos los pilotos empezaban a sufrir el mismo problema, por lo que su posición nunca se vio amenazada.
En la quinta vuelta, Mikhail Kozlovskiy pasaba por boxes tras sufrir dos salidas de pista, el ruso aún adaptándose al mundial y teniendo que aprender los circuitos sobre la marcha.
En la sexta vuelta, Tom Boardman llevaba a cabo su planificado abandono, ya que está en proceso de shakedown del nuevo motor que tuvo que instalar en su coche este fin de semana.
Los neumáticos sufren
Tiago Monteiro, en segunda posición, empezaba a sufrir con las gomas, lo que provocaba el acercamiento de Michelisz. Yvan Muller intentaba acercarse también al húngaro, pero tenía que desistir en el intento por no poder sacar más de sus neumáticos.
Por su parte, Tom Coronel pasaba toda la carrera a rebufo de James Nash. Gradualmente, se veía como la tracción trasera del BMW le había permitido conservar mejor sus neumáticos, lo que le permitía, a dos vueltas del final, sobrepasar al británico por la quinta posición.
En los compases finales, había una bonita lucha entre Stefano D'Aste, Fredy Barth, Mehdi Bennani y James Thompson. Al final, el marroquí prevalecería sobre los demás, logrando ser décimo.
En la línea de meta, Gabriele Tarquini lograba la victoria, habiendo marcado la vuelta rápida de carrera, seguido por Monteiro y Michelisz.
Yvan Muller quedaba fuera del podio, seguido de Coronel y Nash, que era el vencedor entre los independientes.
Pepe Oriola era noveno al final en una carrera dura e intensa para él, mientras que Fernando Monje era decimoquinto y octavo de independientes, logrando así arañar un punto para la clasificación del Trofeo Yokohama.
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