La temporada 2015 del WTCC comenzaba en la misma clave que había terminado la anterior: con Citroën Racing como los dominadores y favoritos absolutos. A todas luces, el año sería un duelo a tres bandas entre José María López, Yvan Muller y Sebastien Loeb.
José María López había aterrizado en el mundial un año antes, para conseguir su primer título con una temporada impecable. Sin duda alguna, el astro argentino y sus cifras eran la referencia a batir.
Yvan Muller comenzaba el año con la convicción de haber superado los problemas de adaptación de su estilo de conducción a los TC1, lo que había sido su principal talón de Aquiles la temporada anterior. El tetracampeón mundial tenía la intención de volver por sus fueros y plantar batalla a su compañero de equipo en la lucha por el título.
Por su parte, Sébastien Loeb tenía un año de experiencia en el WTCC a su favor, si bien enfocaba sus opciones desde el punto de vista de la humildad y reconociendo el mérito de sus compañeros. Loeb, que no necesita presentación, no tenía reparos en admitir: "Sin duda, López es el mejor de todos nosotros, y todos los días aprendo de él."
Pechito, en otro nivel
José María López sabía que tenía por delante una tarea aún más complicada que en 2014, y era la de confirmar o desmentir si realmente estaba tan por encima de sus compañeros y rivales como se había mostrado el año anterior.
Los números no engañan: 12 citas y 24 carreras, en las que López conseguía siete poles y un total de diez victorias, siendo Moscú y Slovakia los dos únicos circuitos en los que el argentino no pisaba el cajón más alto del podio. Pechito igualaba su récord de victorias en 2014, absoluto en la historia del WTCC, confirmando que es el piloto del momento. Su final de campeonato, con tres poles consecutivas seguidas de victorias en las correspondientes primeras carreras, demostraba que, independientemente de tener una ventaja suficiente, el campeón del mundo es un hombre que siempre da lo mejor de sí mismo hasta el final.
La escena final en el podio de Buriram era un resumen perfecto de la temporada, y de lo que Pechito ha conseguido en el WTCC: sus rivales se ponían en fila para felicitarle mientras el bicampeón se acercaba al podio, una muestra de camadería y reconocimiento a un piloto que ha revolucionado el Mundial de Turismos.
Loeb da un paso al frente
Sébastien Loeb se preparaba a conciencia para su segunda temporada en el WTCC, que será la última, al menos, de momento.
El pluricampeón francés conseguía este año su primera pole position y cuatro victorias, con un final de temporada fuerte en el que perdía un merecido subcampeonato por tan sólo un punto de diferencia con su compañero y compatriota Yvan Muller.
Año gris para Muller
Yvan Muller volvía a tener un año aquejado por diversos problemas, que le prevenían de sacar el máximo partido de su Citroën C-Elysée WTCC. En siete ocasiones, el tetracampeón francés no pudo pasar a la Q3, perdiendo puntos y oportunidades en la primera carrera del fin de semana.
Una victoria en la cita final en Qatar le permitía a Muller conseguir el subcampeonato, con tan sólo un punto de ventaja sobre Loeb, pero 118, más de dos "fines de semana completos" por detrás de Pechito.
Durante la segunda parte de la temporada hubo especulación sobre una posible retirada del francés, aderezada por un posible cambio de aires con la llegada de Volvo. Al final, Muller continuará en Citroën para su última temporada oficial en el WTCC, y ya promete seguir luchando por lo más alto.
Michelisz domina los independientes
Norbert Michelisz fue uno de los pilotos a seguir durante 2015. Encuadrado en el equipo Zengo Motorsport, a los mandos de un Honda Civic WTCC privado, el húngaro fue regularmente más rápido que los Honda oficiales, consiguiendo la primera victoria absoluta de la marca este año en Budapest.
Sus actuaciones le sirvieron para ser un invitado regular a las pruebas que Honda realizaba entre carreras, y se espera que pase a formar parte del equipo oficial la próxima temporada.
Michelisz conseguía su segunda corona en el Trofeo Yokohama de Independientes, si bien unas actuaciones grises en Buriram y Qatar hacían que Mehdi Bennani se acercara peligrosamente. El marroquí, a los mandos de un Citroën de Sébastien Loeb Racing, pudo demostrar su velocidad y capacidad al volante, creciendo como piloto a lo largo de la temporada. Al final, Bennani se quedaba a tan sólo cuatro puntos de Michelisz, en la que ha sido su temporada más completa en el WTCC.
También en el Trofeo Yokohama, Campos Racing conseguía completar un año sólido. Después de conseguir el reconocimiento y admiración de todos sus rivales por su fama de poder reparar cualquier problema en un margen de tiempo minúsculo, el equipo español encaraba la temporada 2015 con dos jóvenes franceses, Hugo Valente y John Filippi, ambos pilotos rápidos.
Precisamente era Valente uno de los principales estandartes para los Chevrolet RML Cruze, pero su impetuosidad y errores en momentos clave le hacían perder a él y a su equipo resultados importantes. Por su parte, Filippi tenía dificultades para mantener el nivel de evoluciones de RML y era un visitante habitual de la parte final de la parrilla, si bien en la recta final de la temporada el corso dejaba entrever su potencial.
Al final Campos Racing se quedaba a 12 puntos de Zengo Motorsport en la tabla de equipos independientes, un gran resultado que seguro que le sabe a poco a los guerreros españoles.
Conclusión
2015 fue un año lleno de batallas y momentos épicos, una de las temporadas más emocionantes que ha tenido el WTCC en años recientes. En José María López, Citroën, Norbert Michelisz y Zengo Motorsport el certamen tiene a cuatro merecidos campeones.
Sin duda, el 2016 traerá nuevos desafíos que harán que los seguidores del Mundial de Turismos vuelvan a vibrar con la acción.
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